Las implementaciones de ciudades inteligentes necesitan una infraestructura centralizada
marzo 26, 2019, Scott Foster
La tendencia global hacia las ciudades inteligentes sigue en ascenso. Los beneficios de incorporar el Internet de las Cosas (IoT) en la infraestructura urbana son ampliamente reconocidos. Sin embargo, el mejor camino para convertir una ciudad en una ciudad inteligente puede variar. Los proveedores de soluciones, con diferentes estrategias, enfoques y técnicas, compiten por captar la atención de quienes toman decisiones en las ciudades. Todos coinciden en un punto: la importancia de una red a nivel urbano que respalde los dispositivos IoT que hacen que una ciudad sea más inteligente.
Solo con una red única, escalable y no limitada por el ancho de banda como columna vertebral, una ciudad inteligente podrá alcanzar realmente su máximo potencial. La posibilidad de utilizar distintos tipos de sensores electrónicos para recopilar datos que luego permitan gestionar de manera eficiente los activos y recursos es fundamental. Con una red única, como la Delta Smart Grid Network, esto es posible.
La solución de Delta se inspira en la misma estrategia que los teléfonos inteligentes actuales, que de manera innovadora unieron múltiples productos con un propósito específico en un solo dispositivo altamente capaz: converge la infraestructura de red inteligente, el Wi-Fi en malla y los dispositivos digitales orientados al consumidor en una solución de red urbana única, estandarizada y centralizada.
Esta red resultante se convierte en la infraestructura de comunicaciones mediante la cual todos los dispositivos IoT de la ciudad inteligente pueden conectarse, abriendo así la puerta a una solución urbana eficiente y efectiva.